¡SIEMPRE consulta a tu médico antes de usar un baño de hielo si tienes algún problema de salud!
NO LO USES si: tienes menos de 18 años, estás embarazada, tienes antecedentes de enfermedad cardíaca o presión arterial alta, tienes diabetes, complicaciones como neuropatía o daño retiniano, usas un marcapasos, tienes antecedentes de congelación, tienes una herida abierta, has tenido cirugía reciente, epilepsia o cualquier otro problema de salud o riesgo.
El uso de un baño de hielo puede disminuir drásticamente la temperatura central de tu cuerpo. La inmersión en agua fría contrae los vasos sanguíneos y ralentiza el flujo de sangre por el cuerpo, lo cual, combinado con complicaciones de salud, puede hacer que tu presión arterial aumente y aumente el riesgo de paro cardíaco o accidente cerebrovascular.
Efectos secundarios: el efecto secundario más notable de un baño de hielo es sentir un intenso frío, pero otros efectos secundarios de permanecer demasiado tiempo en un baño de hielo son: hipotermia, congelación, taquicardia (ritmo cardíaco rápido), arritmias (ritmo cardíaco anormal), reacciones alérgicas y choque anafiláctico.
Nuestra recomendación: a pesar de los posibles efectos secundarios y advertencias, ¡ usar correctamente un baño de hielo realmente tiene muchos beneficios para la salud! Siempre recomendamos comenzar pasando solo unos minutos en el baño de hielo y aumentar lentamente hasta el tiempo recomendado, nunca fuerces a tu cuerpo más allá de sus límites.
1°C = 1 minuto de inmersión
3°C = 3 minutos de inmersión
5°C = 5 minutos de inmersión
10°C = 10 minutos de inmersión
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